1. Introducción
En esta segunda entrada de
análisis de la evolución salarial de la economía española, repasaremos uno de
los problemas que, en mi opinión, es urgente corregir de forma tajante. Este es
la brecha salarial, que es la diferencia de salarios entre géneros. Por todo el
mundo es sabido que no existe una sola razón para diferenciar el valor del trabajo
de una persona según su sexo. Sin embargo y lamentablemente, aún debemos hablar
de una de las representaciones más graves del machismo, la cual se encuentra
muy presente en nuestra sociedad. Realizaremos las mismas distinciones que en
la primera parte de este análisis, pasando en primer lugar por los datos
generales y separándolos por el tipo de jornada (completa o parcial). Tras
hacer dicha introducción, pasaremos a observar los datos según el tipo de
contrato (indefinido o temporal), la nacionalidad del trabajador o trabajadora
y por rangos de edad, distinguiendo entre jóvenes (16 a 24 años), adultos
jóvenes (25 a 39 años), adultos (40 a 54 años) y adultos mayores (más de 55
años). De esta manera, trataremos de saber con qué filtro o filtros, la brecha
salarial (BS en adelante) incide en mayor o menor medida dentro de nuestra
fuerza laboral. Sin más dilación, comencemos.
2. Análisis de la Brecha Salarial (2008 – 2015)
2.1. Brecha Salarial Total y según Tipo de Jornada
Gráfico 1: Brecha Salarial absoluta (En €) y relativa
(En %) / 2008 - 2015
Como podemos observar en el Gráfico
1, los primeros años de crisis fueron catastróficos. Pasamos de una
BS de 5.292,71€ en 2008 a llegar hasta los 6.160,59€ anuales en 2013- Dicha
subida implicó un aumento de más de dos puntos entre estos dos años (del 21,9%
al 24%). Actualmente nos encontramos en sentido contrario al descrito, ya que
los últimos datos referentes a 2015 indican una bajada hasta los 5.941,18€
(22,9%). En el cómputo total de estos 87 años. La BS ha registrado un aumento
medio anual del 1,66%, el cual es el doble del aumento medio anual registrado
por los salarios en el mismo periodo de tiempo (0,78%). Por tanto, podemos
decir que, en líneas generales, la crisis o las fluctuaciones económicas son
uno de los problemas a los que se enfrenta la brecha salarial, ya que periodos
de recesión económica dejan fuertes subidas de la misma y periodos de
recuperación la suavizan o incluso la reducen como acabamos de ver.
Gráfico 2: Brecha Salarial absoluta (En €) y relativa
(En %) - Jornada Completa / 2008 - 2015
Una vez filtramos según el tipo
de jornada, vemos en el Gráfico 2 que la BS para los
trabajadores a jornada completa ha fluctuado durante todo el periodo que va
desde 2008 a 2015. Al comienzo de la crisis teníamos una brecha que medía 3.478,92
€ y que significaba una diferencia relativa del 13,7%. En 2015 fue su último movimiento
registrado, que fue una subida que la sitúa en los 3.463,23 € (12,1%). Por tanto, en líneas generales podemos decir que, a
pesar del último dato con respecto al año anterior, hablamos de una tendencia
decreciente que tiene una velocidad 0,06% anual, la cual es mínima si tenemos
en cuenta que los salarios en este colectivo suben a una tasa del 1,69% anual
como ya vimos en la primera parte de este análisis.
Gráfico 3: Brecha Salarial absoluta (En €) y relativa
(En %) - Jornada Parcial / 2008 - 2015
Hay muchas diferencias entre
trabajar a jornada completa y parcial, como puede ser la diferencia de salario
debido a la menor carga laboral. Sin embargo, hay una ventaja de los segundos
con respecto a los primeros para el sector femenino, y es la menor brecha
salarial que mantienen. Esto no es debido a los menores salarios, ya que en términos
relativos y partiendo de un dato aún más negativo como era su BS en 2008 (1.730,18
€ que significaban un 15,2%), se ha reducido a tal velocidad (-12,36% anual)
que en 2015 ya hablamos de una BS de apenas 687,20 €, lo cual supone una bajada
hasta alcanzar un 6,5% de diferencia relativa. Esto puede deberse a la
precariedad de dichos empleos, los cuales no aprecian distinciones de género.
También merece la pena señalar que tras marcar en 2014 el mínimo de esta serie
con una diferencia del 3,4%, su evolución es creciente en ese último año
registrado.
2.2. Brecha Salarial según Tipo de Contrato
Gráfico 4: Brecha Salarial absoluta (En €) y relativa
(En %) - Contrato Indefinido / 2008 - 2015
En este segundo filtro,
observaremos el Gráfico 4 y el Gráfico 5 para analizar el
comportamiento de la BS si nos fijamos en el tipo de contrato que tienen los
trabajadores, diferenciando entre contrato indefinido o temporal. Si nos
fijamos en el primero, podemos ver que sigue una tendencia muy similar al Gráfico
1, donde la BS total presentaba una subida durante los primeros
años de crisis, hasta concretamente el año 2013. Dicha subida parte de los 6.320,52 € de brecha salarial en 2008
(24%) hasta los 7.124,87 € de 2013
(25,7%). Esto supone un aumento de casi dos puntos de la diferencia salarial
relativa. Tras este periodo de subida, podemos apreciar una clara bajada que
sitúa a la BS en 2015 en 6.762,38 €
(24,3%), volviendo de nuevo a los valores pre-crisis. Estos datos no se salen
de la normalidad debido al fuerte peso que tienen estos contratos en nuestro
mercado laboral, por lo que su semejanza con los datos generales es entendible.
Este peso lo podemos comprobar con los datos de la última Encuesta de Población
Activa (2017 – T2), la cual muestra que suponen el 73,2% de los contratos entre
asalariados. Debido a su comportamiento es preciso señalar que, en estos 8
años, la BS ha mantenido una velocidad de crecimiento del 0,97% anual, contando
con la reducción que acabamos de comentar. Este dato es similar pero mayor al
observado en el crecimiento de los salarios dentro de este colectivo, que
recordamos es del 0,61% anual.
Gráfico 5: Brecha Salarial absoluta (En €) y relativa
(En %) - Contrato Temporal / 2008 - 2015
En cuanto a los contratos
temporales, su situación es un tanto diferente a la de los indefinidos. En este
caso, debemos hablar de un estancamiento de la brecha salarial durante todo el
periodo de crisis y posterior recuperación. Con valores que tímidamente se han
movido entre los 1.500 € y los 2.500 €, lo cual supone una BS de entre el 8% y
el 12%. Estos datos no dejan de ser más positivos que los observados en los
contratos indefinidos, debido a que la BS relativa es la mitad de grande y la
diferencia con la absoluta es aún mayor. En general, estos datos guardan mucha
similitud con los observados por tipo de jornada. Siendo los contratos
temporales los que, debido en gran medida a su precariedad, sufren en menor
medida la BS existente en nuestra economía. Sin embargo, cabe destacar que tras
observar los datos desde perspectivas que nada tienen que ver con las
circunstancias personales, no sólo encontramos datos donde la existe brecha
salarial, sino que la misma evoluciona de forma anticíclica al ciclo económico.
Veamos que sucede si nos fijamos en datos como la nacionalidad o la edad del
trabajador o trabajadora.
2.3. Brecha Salarial según Nacionalidad
Gráfico 6: Brecha Salarial absoluta (En €) y relativa
(En %) – N. Española / 2008 - 2015
En el Gráfico 6 podemos
observar la evolución de la BS entre los trabajadores españoles. En este caso
casi podemos hablar de una copia de los datos generales, aunque con alguna
matización. Estas matizaciones tienen que ver con que hablamos de valores un
tanto mayores que en los datos totales, siendo idéntica su tendencia. Partimos
de una subida los seis primeros años de crisis, pasando de los 5.560,22 € en 2008 (22,3%) hasta los 6.413,17 € (24,4%) en 2013. Por tanto,
la brecha salarial relativa mantiene la subida de casi dos puntos que hemos
observado ya en un par de casos. A esta subida le sigue una bajada que es en la
que nos encontramos actualmente, y en la que su último dato nos revela una BS
de 6.157,84 € (23,2%) en 2015. Por
tanto, y como hemos avanzado antes, las tendencias son prácticamente las
mismas, pero con datos un tanto más elevados que los generales. Un ejemplo de
ello lo vemos en el máximo alcanzado en 2013 (24,3% comparado con el 24%
general). En comparación con la tendencia de crecimiento de los salarios, de
nuevo es una situación similar. En ella, vemos que los salarios han aumentado
en mucha menor medida que la brecha salarial (0,66% frente a un 1,47% anual),
por lo que podemos decir que el sector femenino presenta una pérdida de poder
adquisitivo en este aspecto durante los años de recesión.
Gráfico 7: Brecha Salarial absoluta (En €) – N.
Extranjera / 2008 - 2015
Tabla 1: Resumen de la evolución de
la Brecha Salarial absoluta por Nacionalidad / 2008 - 2015
2008
|
2013
|
2015
|
TCAA BS
|
TCAA Salarios
|
|
UE Sin España
|
3.712,68 €
|
5.324,07 €
|
5.681,72 €
|
6,27%
|
1,86%
|
Europa Sin UE
|
3.553,89
€
|
6.508,41
€
|
6.256,00
€
|
17,00%
|
1,02%
|
América Latina
|
4.893,08 €
|
5.681,72 €
|
3.020,33 €
|
-3,11%
|
0,49%
|
R. del Mundo
|
4.995,58
€
|
4.030,19
€
|
4.439,62
€
|
1,53%
|
-0,16%
|
Si observamos los datos referentes a la mano de obra extranjera residente
en España, podemos comprobar que mantienen evoluciones dispares. Esto lo
podemos ver a través del Gráfico 7 y de la Tabla
1, los cuales nos permiten comparar de forma gráfica y analítica la
tendencia y los datos absolutos registrados por cada uno de los colectivos. En
el caso del primer periodo, que implica la recesión de nuestra economía podemos
observar que los colectivos mayoritarios, como son los europeos comunitarios y
no comunitarios y los latinos también sufrieron una subida de sus respectivas
brechas salariales, mientras que el resto de trabajadores extranjeros
experimentaron la tendencia contraria, ya que su BS se redujo. Tras este
periodo, llegamos a la etapa de recuperación y sólo dos colectivos mantienen la
tendencia general. Estos son los europeos no comunitarios y los latinos, donde
estos últimos experimentan una reducción tan pronunciada que son los únicos que
registraron un decrecimiento anual durante todo el periodo (-3,11%). Sin
embargo, tanto los europeos comunitarios como el resto de extranjeros fuera de
estos colectivos vieron su BS aumentar hasta registrar valores relativos
preocupantes, los cuales observaremos a continuación.
Gráfico 8: Brecha Salarial relativa (En %) – N.
Extranjera / 2008 - 2015
Tabla 2: Resumen de la evolución de
la Brecha Salarial relativa por Nacionalidad / 2008 - 2015
2008
|
2013
|
2015
|
TCAA BS
|
TCAA Salarios
|
|
UE Sin España
|
20,2%
|
25,9%
|
26,0%
|
6,27%
|
1,86%
|
Europa Sin UE
|
19,1%
|
27,8%
|
32,6%
|
17,00%
|
1,02%
|
América Latina
|
23,5%
|
26,0%
|
19,2%
|
-3,11%
|
0,49%
|
R. del Mundo
|
24,8%
|
27,0%
|
28,9%
|
1,53%
|
-0,16%
|
Para esta segunda parte, podemos servirnos del Gráfico 8 y de la Tabla
2 para comprobar que, en términos relativos, la situación de los
extranjeros es bastante peor que la de los trabajadores nacionales. Esto se ve
con facilidad en el periodo de recesión que va desde 2008 hasta 2013. En él,
podemos ver una fortísima subida de la BS relativa, como en el caso de los europeos
comunitarios (20,2% en 2008 y 25,9% en 2013) y no comunitarios (del 19,1% en
2008 al 27,8% en 2013). En los ostros dos casos no es tanta la subida de la BS,
sino los valores medios que obtiene en este análisis. Los latinos registran un
elevado 23,5% y el resto de extranjeros un 24,8% antes de la crisis, sin contar
las subidas que la misma recesión provoca en estos datos. Durante el segundo
periodo, que implica la recuperación de la economía española, hablamos de
empeoramiento en líneas generales, ya que salvo el colectivo latino que
experimenta una gran reducción hasta el 19,2%, el resto de extranjeros ven como
la BS no para de aumentar hasta datos como el 32,6% de los europeos no
comunitarios o el 28,9% del resto de extranjeros. En definitiva, adquieren
valores estratosféricamente relativos y muy dispares al crecimiento de los
salarios, donde salvo el último colectivo (resto de extranjeros), todos
experimentaron una variación anual positiva.
2.4. Brecha Salarial según Rangos de Edad
Gráfico 9: Brecha Salarial absoluta (En €) – Por Edad
/ 2008 - 2015
Tabla 3: Resumen de la evolución de
la Brecha Salarial absoluta por Edad / 2008 - 2015
2008
|
2013
|
2015
|
TCAA BS
|
TCAA Salarios
|
|
Jóvenes
|
2.873,25 €
|
2.445,77 €
|
2.514,41 €
|
-1,89%
|
-2,23%
|
Adultos Jóvenes
|
3.646,26
€
|
4.150,71
€
|
3.691,04
€
|
0,17%
|
-1,38%
|
Adultos
|
6.220,10 €
|
7.176,12 €
|
6.667,63 €
|
1,00%
|
0,32%
|
Adultos Mayores
|
6.120,74
€
|
7.574,71
€
|
8.322,31
€
|
4,49%
|
0,49%
|
A la hora de analizar los datos
absolutos según el filtro de la edad tenemos que tener presente que el mercado
laboral español prima mucho la experiencia profesional (sin que suene como
defecto o virtud, sino como característica), por lo que las diferencias
absolutas entre diferentes brechas también son palpables entre los salarios,
por lo que analizaremos los datos de cada colectivo de forma independiente y
sólo compararemos datos relativos como las TCAA. Si lo hacemos de forma
ascendente, en el grupo de los jóvenes podemos observar que la brecha salarial
ha descendido desde los 2.873,25 € en 2008 hasta los 2.445,77 € en 2013, lo
cual representa una caída anual del -1,89%. A dicha caída le acompaña la de los
salarios, que entre este grupo se colocó en el -2,23% anual. A pesar de ello,
en estos dos últimos años dicha BS ha aumentado (2.514,41 €). Si hablamos del
resto de grupos, hablamos de el efecto contrario al observado entre los
jóvenes, ya que mientras que la crisis y la precariedad han servido para
disminuir la brecha salarial entre los noveles, en el periodo 2008 – 2013 han
aumentado las BS de cada uno de los grupos a excepción de este primero que
hemos analizado. Si en el año 2008, los grupos de adultos jóvenes, adultos y
adultos mayores registraban los datos que observamos en la Tabla 3, hasta el
año 2013 mantuvieron unas tasas del 0,17%, 1% y 4,49% anual los tres grupos
antes indicados, respectivamente. El dato más elevado, como avanzábamos antes, es
el de los adultos mayores, que alcanzaron una brecha salarial en 2013 de
7.574,71 €, lo que supone una diferencia de 631,23 € por cada nómina si
recibiéremos 12 pagas anuales. El problema no acaba en 2013, ya que a pesar de
que los grupos de “adultos jóvenes” y “adultos” consiguieron rebajar su brecha
salarial para 2015, el grupo más avanzado en edad no tuvo la misma evolución,
se fue hasta los 8.322,31 € anuales de brecha salarial en ese mismo año. Todo
este transcurso de los acontecimientos se daba sobre un contexto en el que los
salarios disminuían un 1,38% anual para los adultos más jóvenes mientras que
aumentaban un 0,32% y un 0,49% anual para los otros dos grupos antes tratados.
Si observamos las brechas salariales en el transcurso de este periodo por rango
de edad de forma relativa (brecha salarial en proporción al salario del sexo
masculino en ese grupo social) nos queda el siguiente gráfico:
Gráfico 10: Brecha Salarial relativa (En %) – Por Edad
/ 2008 - 2015
Podemos observar que los grupos
más jóvenes mantienen brechas salariales sustancialmente por debajo de los
grupos de mayor edad. Además, los últimos datos nos revelan una tendencia
creciente en los primeros, mientras que esa tendencia es decreciente o neutra en
los segundos. Por ello, cabe plantearse al ver estos datos si se están tomando
medidas de reducción de dicha brecha salarial, ya que sería un buen objetivo a
medio plazo el establecer una cierta paz social respecto de este tema. Tras
haber desengranado por determinados filtros estos nuevos datos de 2015 que nos
dejan las Encuestas de Estructura Salarial, pasamos a realizar una conclusión a
modo de resumen.
3. Conclusión
En resumen, podemos decir que la
economía española sigue dubitativa ante este problema social que lleva acechándola
tanto tiempo. Si bien es cierto que en algunos campos que han cogido renombre
como las jornadas a tiempo parcial o los contratos temporales, esto es así
debido a la precariedad existente en dichos contrarios. Algo que hay que
remarcar es que la brecha salarial aumenta en mayor medida tanto de forma
relativa como absoluta cuanto más salario medio se cobra en un determinado
empleo. Y esto lo hemos comprobado en los gráficos que nos separaban dicha
brecha según la edad y según la nacionalidad, dejando constancia de la
diferencia entre los adultos de más de 55 años, donde rozábamos una brecha
salarial del 27,5% mientras que los jóvenes se encuentran en 2015 con un 20,6%.
La crisis económica ha servido para aumentar el tamaño de dicha brecha, y eso
son razones fuera del aspecto económico. Diferenciar a una persona por su género
para pagarla más menos es algo que debería causar un mínimo desconcierto en la
mente de todos. Y lamentablemente es un tema que no lo arregla “la mano
invisible”, sino la propia autoridad estatal. Medidas que poco tienen que ver
con las adoptadas por el gobierno, el cual ve en mínimos históricos a la propia
brecha. En pocas palabras, el tamaño de la brecha es directamente proporcional
a la experiencia que atesore un determinado trabajador o trabajadora y el
tiempo semanal que le dediquen a trabajar. Aquí concluye el análisis acerca de
la Encuesta de Estructura Salarial con 2015 como dato actualizado, más y mejor
en el próximo año. Saludos y gracias.
Daniel Díaz S.
Referencias
Bibliografía y Fuentes de Información
Instituto
Nacional de Estadística. (28 de Junio de 2017). Encuestas de Estructura
Salarial. Obtenido de Instituto Nacional de Estadística:
http://www.ine.es/welcome.shtml